En su homilía citó la conversación que mantuvo con el Papa Francisco, quien le manifestó que la mujer paraguaya es la más gloriosa de América, y aprovechó para destacar el rol de las madres en los grupos familiares.
“Las madres deben abrazar a sus familias, a sus hijos, también los padres, porque desde la familia nacen los niños y jóvenes con la fortaleza espiritual”, dijo.
Indicó que en el país existen 300.000 personas pobres, en cuya población hay una gran cantidad de niños desnutridos que, tanto ellos como sus familias, no pueden acceder a alimentos.
Asimismo, se refirió a los estupefacientes que genera adicción entre los jóvenes. “La droga está corriendo en el país con negociantes inescrupulosos, esto debe ser parado porque toda la vida familiar se siente afectada. También sabemos que hay pocos centros asistenciales y de recuperación”, apuntó.
Martínez tocó la problemática de abuso sexual en menores que registró un aumento durante la pandemia. “Esto daña por toda la vida, genera heridas muy profundas y por eso la familia debe cuidar a los niños, toda la sociedad y la iglesia”, indicó.
Luego mencionó que la Virgen María tuvo un hijo preso y que “siempre está al lado de sus hijos” y cuida a todos, por más de que se hayan “descarrillado o apartado de la palabra”, informó ABC Color.